El mañana empieza hoy, de Cecelia Ahern

Todos conocimos a esta escritora irlandesa a través de su primer libro, Posdata: te quiero, un libro que me encantó en su momentos, pero a mí me enamoró especialmente en Donde termina el arco iris, uno de mis libros favoritos. Después de él, he intentado leer todos sus libros, siendo Un regalo del cielo, lo último que había leído de ella. Y eso fue hace más de un año, por lo que estaba deseando leer este nuevo libro...

Comienza así...

Dicen que toda historia pierde algo cada vez que se cuenta. De ser ése el caso, ésta no ha perdido nada, puesto que es la primera vez que se cuenta.

Tamara tiene dieciséis años, y es rica y caprichosa. Muy rica y muy caprichosa. Vive en una mansión con sus padres y lo que más le gusta es ir de compras con sus amigas.

Su vida toma un oscuro giro cuando su padre, abrumado por las deudas, decide suicidarse. Tamara y su madre, sin casa ni dinero, tendrán que mudarse a vivir al campo con Rosaleen y Arthur, unos primos un tanto especiales. La vida allí es tranquila, sencilla y saludable, tres cosas que Tamara odia profundamente.

Pero el descubrimiento de un cuaderno mágico, en el que aparece escrito lo que va a ocurrir al día siguiente, cambiará a Tamara para siempre. En sus páginas encontrará que tras la aburrida apariencia de la vida campestre, Rosaleen y Arthur esconden un terrible secreto que la llevará a conocer la verdad sobre ella misma y su familia.

¿Y si.. y si.. y si...? ¿Y si supiéramos lo que va a pasar mañana? ¿Lo arreglaríamos? ¿Seríamos capaces?

Tamara es un personaje que evoluciona muchísimo a lo largo de la historia. Al principio me caía fatal, me parecía una niñata, una niña egoísta y estúpida, pero poco a poco vamos entendiendo que todo es fachada, que está asustada, deprimida y no sabe qué hace en el mundo. Además, tiene muchas respuestas y pensamientos ingeniosos, que te sacan alguna que otra carcajada.

A partir de su encuentro con Marcus, un joven que lleva una biblioteca ambulante (la idea me ha parecido muy interesante), encuentra un libro con las páginas en blanco, que cada día le narra, de su propio puño y letra los acontecimientos que se desarollarán al día siguiente. Todo esto me ha recordado a una serie que me encantaba de pequeña, por lo que este elemento de la historia no me pareció tan original.

A veces, la narración desde el punto de vista de Tamara se me hacía un poco cargante, ya que la prota no para de quejarse, divagar y preguntarse por qué su vida era así. Aunque es lógico, después de haberse encontrado ella misma el cadáver de su padre.

Una de las mejores cosas del libro son los personajes secundarios, que son bastante interesantes y que hacen bien su papel en la historia: Rosaleen, Arthur, la madre de Tamara, Weseley, Marcus y la hermana Ignatius (menudo nombre). 

La historia va alrededor de esa nueva vida que tiene que llevar nuestra protagonista, donde todo es extraño y espeluznante. Si bien es cierto que la prota es un poco malcriada y contestona, con una mujer como Rosaleen cuidándome, yo lo hubiera sido mucho más, pues la mujer es agobiante, asfixiante y controladora hasta límites insospechados.

Mi personaje favorito, sin duda, ha sido Weseley, el joven ayudante de Arthur que ayudará a nuestra protagonista a descubrir qué es lo que ocurre en esa casa, qué pasa con la madre de Tamara y las cnsecuencias que tienen nuestros actos en el futuro.

Aunque casi todos los libros de esta escritora contienen algo de fantástico, en este caso el diario mágico, no estaba acostumbrada a ese halo de suspense que envuelve la trama.

Y luego, cuando pensabas que el libro se desarollaba de forma muy lenta y poco emocionante, el final nos desvela muchos porqués, haciendo la lectura mucho más entretenida y llena de acción. No me esperaba para nada ese final, quitando ciertos detalles que me olía desde la mitad del libro. 

Para abreviar, El mañana empieza hoy es el libro más juvenil de la escritora, que podría haber sido mucho más entretenido si el principio y el nudo estuviera más acorde con ese final trepidante y entretenido que nos presenta. Como es habitual en las historias de Cecelia Ahern, entraña un mensaje: toda decisión tomada en el presente marcará el futuro.

-¿Vives cerca?

-Está mintiendo.

-¿Ah, sí? Y¿dónde coño crees que vivo? ¿Crees que he venido volando desde Los Ángeles para dar un paseo a medianoche?

[¡Agradecimientos a Planeta por el ejemplar!]